Hay ciertos comportamientos infantiles que no debemos pasar por alto como padres, y debemos estar atentos, más aún si se repiten cotidianamente.
Los niños necesitan sentirse escuchados y comprendidos; necesitan de nuestra empatía y límites bajo un ambiente de respeto mutuo.
- Demasiadas “Pataletas”. Un niño que hace demasiasdas pataletas, es aquel que ha tomado el mando de la situación y sabe que, con cualquier pataleta conseguirá lo que quiere, teniendo a los adultos a su disposición. Lo importante es preguntarnos qué lo tiene frustrado, qué está pasando que lo expresa mediante llanto, pataletas y caprichos; descubrir qué hay detrás de este comportamiento y qué es lo que realmente está buscando con ello.
- Agresividad. Los niños suelen demostrar su frustración a través de la ra, gritos, patadas; pero cuando esto se vuelve habitual y comienza a generar problemas fuera de casa (jardín, colegio, casas de familiares, etc), se debe atender al problema que hay de fondo. Hay que averiguar aquello que le está molestando al niño y que lo tiene inquieto, con rabia,y que no sabe cómo expresar.
- Indiferencia. Esta actitud es muy común en los niños, hacer caso omiso a los llamados o peticiones de los padres. Cuando esto ocurra, lo ideal es hacer contacto físico y explicarle al niño que sabía que lo estaba ecuchando. Lo importante es que esta conducta no se transforme en algo habitual; dado que podría evolucionar en una conducta desafiante.
- Desobediencia. Los límites para los niños son necesarios siempre y es importante marcar las normas desde el primer momento. Acostúmbralo a ser responsable en pequeñas obligaciones de su vida cotidiana (ordenar juguetes, ordenar ropa, etc).
- Mentiras. Las mentiras se tornan peligrosas cuando los niños las utilizan para lograr algo en concreto. Para ello, es importante enseñarles y explicarles que la mentira no es medio para conseguir fines.
- Tristeza. Cuando los niños están enfermos, se sienten más débiles y su ánimo disminuye; pero cuando esta emoción permanece en el tiempo, es necesario poner atención a lo que pueda estar provocándola (bulliyng, culpa, miedo, etc)
Estar atentos como padres a las necesidades emocionales de nuestros hijos, los ayudará a crecer más sanamente.
Si bien no existe un manual para ser padres, si tenemos el amor, cariño, tiempo y dedicación para entregarle a nuestros hijos.
No olvides que el tiempo y la comprensión, es el mejor regalo que puedes hacerle a tus hijos.
Psicóloga, Alejandra Kaminski R.